La actividad agropecuaria define la economía local con la comercialización de algunos productos como: papa, arveja, cebolla y leche. En cada comunidad cada productor cuenta con un promedio de 1/2 a 3/4 de hectarias de extensión, destinadas a su actividad agropecuaria.

La agricultura convencional desarrollada atraviesa una crisis, que se refleja en el abuso de fertilizantes quimicos y agrotóxicos, en la residualidad de los alimentos, en la dependencia de insumos externos de elevado costo y un desequilibrio ecológico del medio ambiente comunal atentando a la salud humana y a la economia campesina. Los agricultores evidencian la pérdida de fertilidad de la mayoria de sus suelos, existe una ausencia de condiciones que generen actividad micro y macrobiologica diversa que active la nutrición del suelo para lograr plantas sanas y resistentes con abundante producción de biomasa para prescindir de los agrotóxicos.

La mayoria de las comunidades además presenta limitaciones respecto al tamano de las tierras, la propuesta orienta las acciones a optimizar las superficies de terreno mediante la recuperación de su fertilidad, asociación de cultivos, producción escalonada, aprovechamiento de los recursos que ofrece la misma finca.

La propuesta pretende desarrollar una agricultura sostenible mediante procesos de reciclaje de materia orgánica en estado liquido y sólido orientada a la producción intensiva de hortalizas, cultivos para el autoconsumo y generación de excedentes.