El proyecto tiene como objetivo desarrollar e implementar un sistema de gestión del conocimiento para incrementar las capacidades en las OBCs, especialmente indígenas y campesinas, y ONGs del NOA para la formulación, ejecución y evaluación de los proyectos según criterios de sustentabilidad ambiental, social y económica, teniendo en cuenta el fortalecimiento organizacional y la perspectiva de género.
Los beneficiarios directos son en primera instancia las OBCs y ONGs del NOA que son apoyadas por el PPD, y otras organizaciones que deseen presentar propuestas a futuro y que contarán con materiales de apoyo metodológico que les faciliten la formulación participativa y la identificación correcta del/los problemas a resolver desde un enfoque de sustentabilidad ambiental, social y económica.
El área geográfica del proyecto, coincidente con la del PPD, contiene a una gran diversidad de paisajes y ecosistemas: el chaco seco, la selva de yungas, monte de sierras y bolsones, la puna y el altoandino, cada uno de ellos con sus singularidades biológicas, culturales y socioeconómicas. En las diferentes eco regiones y comunidades, las problemáticas ambientales tienen elementos comunes como son la presión sobre los recursos naturales como el bosque y el agua, el deterioro de los suelos, el uso excesivo de agroquímicos y la disputa por el acceso a recursos estratégicos como agua y tierra. El cambio climático produjo el corrimiento de la ishoieta de los 600 mm hacia el NO, provocando cambios en el sector agropecuario, con impactos tecnológicos y socioambientales.
La diversidad de pueblos originarios y campesinos implica diversidad de culturas asociadas a las historias de las comunidades y a las formas de vida de cada una de ellas. En este escenario multiétnico y multicultural hay patrones comunes en cuanto a problemáticas de organización y de género. Por una lado, organizaciones débiles, basadas en liderazgos fuertes, lo que se traduce en escasa participación comunitaria. Y por otro, la ausencia de enfoque de género, con mujeres y niños ?invisibilizados? en los procesos de diagnósticos y de soluciones. Uno y otro derivan en procesos y proyectos que pocas veces contribuyen a generar sociedades más empoderadas.