Los Centros Chachis Tsejpi y Jeyambi, ubicados en el río Cayapas del Biocorredor del Chocó esmeraldas, vienen conservando sus bosques; desde hace diez años a través del Programa Socio Bosque, conservan alrededor de 2000 has, ratificando su arraigo con la madre tierra.
El territorio Chachi no es sólo el patrimonio de la etnia, del que se obtiene el sustento diario y la base física del pueblo. El territorio, que por siglos ha pertenecido al Pueblo Chachi, es también la morada, el olimpo de sus espíritus, de sus ancestros. Por esto el atentar contra el mismo, el convertirlo en objeto de límites y de compraventa, no afecta sóIo la dimensión económica, sino toma la dimensión ideológica. La tierra rebasa el simple valor de cambio y de uso, dados por la "civilización" para alcanzar un valor trascendente que el mundo monetizado desconoce y niega. De aquí la importancia de los movimientos reivindicativos del territorio; si se le afianza éste, no sólo se les ha arrancado su hábitat sino su cosmovisión, su organicidad, su "proyecto de vida". En la cosmovisión chachi el hombre es una unidad con el cosmos, los espíritus, ante Ios cuales, el hombre común no mantiene una relación de dominio o poder si no de reciprocidad. Los lugares en los que habitan los espíritus deben ser respetados y si involuntariamente se allana sus dominios, se debe realizar determinados rituales, ante Ios brujos cualificados y restablecer Ia unidad armoniosa'
Con el proyecto se mantendrá la conservación de los bosques ante el programa Socio Bosque, se fortalecerá la gestión del territorio, se elaborarán los planes de contingencia en donde se incluirá el rescate de los saberes ancestrales relacionados con la medicina ancestral mejorando la relación con el MSP, se formará un grupo dedicado a la producción y venta de plantas medicinales en fresco. Todo el proceso será apoyado por la Fundación Altropico, que viene trabajando por años en el territorio.