La Asociación de Agricultores con personería y cédula jurídica No. 3-002-124252-33, se constituyó como organización en el ano 1992, amparados a la necesidad de obtener un lugar donde producir y desarrollar sus programas productivos.
Este proyecto se desarrollará en las áreas de reserva que posee la organización y la Reserva Natural del Asentamiento Junquillal, en el Sector La Florcita, a uno 12 kilómetros del centro del distrito (27 de Abril) y a 30 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz, en Guanacaste. La reserva es parte del 20% del área que por ley, el Instituto de Desarrollo Agrario segrega de la compra total de la finca, siendo para este caso un área total de 350 hectáreas de bosque.
La población de mayor influencia para el proyecto son los Barrio de Paraíso, Las Delicias, Río Seco, Playa Negra, Playa Junquillal y otros pequenos caseríos aledanos. Donde la costa de Junquillal, se convierte en un gran atractivo y reclutamiento de turistas, los cuales hoy en día circulan por esos alrededores, deleitándose de la belleza escénica del lugar, y de su biodiversidad.
El principal objetivo de la Asociacion es contribuir con la Producción y el uso sostenible de la Biodiversidad en la reserva del Asentamiento Junquillal, ?Sector La Florcita? a través del desarrollo de una producción apícola orgánica. Como ojetivos especificos tenemos:
-Incrementar los rendimientos de miel regional en cantidad y calidad.
-Identificar y diferenciar el Producto en el mercado para su comercialización.
-Continuar con las labores de protección de la reserva. Organizando brigadas con incendios.
-Mejorar la dieta y los ingresos económicos de los socios del asentamiento Junquillal.
La zona de vida predominante es la de Bosque Tropical Seco (Bts), con gran variedad de flora producto de las áreas destinadas en el Asentamiento a reserva forestal y praderas donde son endémicas gran variedad de especies melíferas y poliníferas y que servirá de albergue al proyecto, con lo cual asegura la continuidad del manejo de la reserva, por cuanto la apicultura es una actividad sustentable, que además de ser una de las prácticas ganaderas con mayor capacidad de generación de divisas, ayuda a mejorar con su producto la calidad nutricional del pueblo y favorece el mejoramiento de la producción de forraje de su inventario de arbustos, árboles y otras plantas, ya que al pecorear los insectos el néctar y polen, favorecen la polinización de sus flores y con ello el mejoramiento en tamano, cantidad y porcentaje de germinación de las semillas producidas por cada especie, tanto forrajera como arbórea.